Noé fue llamado un predicador de la justicia. Durante 120 años predicó de un Dios santo y justo, y Cristo, la justicia del creyente. Piensa en ello, Él predicó durante 120 años y no vio un convertido. . . ¡ninguno! Ni una sola persona entró en el arca, excepto su familia. Pero entonces, imagínate lo agradecido que Noé estuvo por esas 7 almas ... su familia. Apuesto a que Noé continuó predicando después a sólo 7 almas. Y él estaba muy agradecido por su pequeña congregación.