"Mis queridos hermanos, deben procurar vivir cada hora por la gracia de Dios que nos perdona, nos justifica y nos suple todo lo necesario en Jesucristo.
La fe que tu profesas en Jesús, mi hermana, y que tu profesas, mi hermano les capacita para asumir su lugar en los roles de sumisión y liderazgo de una manera bíblica y amable, deben experimentar lo que significa construir sus vidas sobre la experiencia del perdón de Dios, la justificación y la ayuda prometida por Dios y llevarlo en su matrimonio."